Antonio Ricaurte confirmó a un medio nacional que no renunciará al cargo de concejal de Quito por el cual fue elegido en 2014 por el movimiento Vive.
Eso afirmó la tarde de este miércoles 2 de septiembre del 2015, minutos antes de ofrecer una rueda de prensa en el Municipio, en medio de entredichos por el video que admitió que grabó en un momento difícil de su vida, para compartirlo solo con su esposa, y que, lamentablemente, como ratificó, se hizo público y afectó a su colega en el Concejo Metropolitano, Carla Cevallos.
"Una cosa es el trabajo. No me acercaré a la concejala Cevallos. Si piden una medida de alejamiento pues tendremos que estar a cien metros de distancia". Eso dijo Ricaurte en la rueda de prensa que duró pocos minutos. Señaló que no hablará más de la polémica causada por el video. "Con la concejala Carla Cevallos tuvimos una gran amistad. Nada más. El contenido del video no se compadece con la realidad". (Fue hecho) "en circunstancias emocionales complicadas".
El edil admitió que el contenido del video que filmó ha conmocionado a la opinión pública. Hace ocho meses, dijo, salió de su hogar. "Son humanos, tienen relaciones, esposos, novios. Tuve un sufrimiento grande por estar alejado de mi esposa e hijos que son mi gran pasión. Se dijo muchas cosas, cuentos, dimes y diretes. Cuando uno sufre comete errores. Hace cuatro meses grabé el video. Estaba afectado por estar lejos de mi esposa e hijos", agregó.
Cevallos, de 24 años, presentó ayer 1 de septiembre una denuncia en la Unidad de Contravenciones. Asegura que se ha mancillado su dignidad. Y por eso pide prisión de 15 a 30 días para él. También una medida de alejamiento. En su movimiento, Vive, hay voces que cuestionan su accionar. Por el tema sería llevado a la Comisión de Disciplina.
Él ha ofrecido disculpas a la concejala y ha dicho que no tenía por qué vivir este mal momento. Tampoco ha querido hablar de su futuro político.
(Con información de ElComercio.com)
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